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Comencé como interno en un centro, sin saber realmente qué esperar, pero el apoyo que recibí me permitió crecer constantemente dentro del programa. Hoy, soy un ejemplo de perseverancia y cambio. He aprendido habilidades que no solo me han permitido desarrollarme profesionalmente, sino también mejorar mi vida personal. Mi progreso es una verdadera pauta a seguir para aquellos que aún están en el proceso. Estoy agradecido por todo lo que me ha permitido lograr este programa y cómo ha transformado mi vida.

Al principio, era escéptico acerca de mi inglés, pero este programa me ayudó a mejorar no solo en el idioma, sino a darme cuenta de que era más que capaz de utilizar esa habilidad para mi beneficio. Fue un gran alivio salir de la rehabilitación con un trabajo ya asegurado antes de incluso dejar el centro. Gracias a Media Luz, pude dar ese paso crucial hacia mi recuperación y hacia un futuro más estable, todo mientras confiaba en mi propio potencial.

Estoy aún en el programa de rehabilitación, pero este camino ya ha cambiado mi vida. Estoy trabajando para ahorrar dinero y construir un futuro sin la preocupación constante del alquiler o las facturas que a veces me retrasan. Estar en el programa me ha permitido enfocarme en lo que realmente importa: proveer para mis hijos y trabajar hacia un futuro estable. Ahora tengo la claridad para no solo apoyar a mi familia, sino también crecer como persona sin distracciones. Este programa me está ayudando a crear la vida que siempre quise para mis hijos.

Compré un coche, dejé una relación tóxica de la que no podía escapar por falta de autoestima, y finalmente encontré mi verdadero valor. La soledad ya no forma parte de mi vida. Ahora estoy en un lugar donde me siento bienvenido, donde no tengo que pasar hambre ni dolor. Puedo ir a trabajar todos los días y regresar a un lugar seguro, sabiendo que el programa Media Luz sigue estableciendo metas para mí, y todo esto es posible gracias a este programa que me ha dado la oportunidad de cambiar mi vida.